“Primero fue el desconcierto ante lo que estaba ocurriendo ese viernes 18 de octubre de 2019. La llamada de los estudiantes a evadir el Metro por el alza del pasaje, era el inicio de algo mucho más grande de lo que posiblemente nadie veía venir. Frases de nuestras autoridades, como, por ejemplo: “Cabros, esto no prendió” o “Estamos en guerra” no hicieron más que rebalsar la rabia acumulada por largo tiempo y que, tal como se escuchó y escribió en las paredes durante esos primeros días: “No son 30 pesos, son 30 años” … ¿Qué hacer para entender esto? Siendo fotógrafo tenía que salir “armado” con cámara en mano. Comencé a recorrer las calles cercanas a Plaza Italia y a fotografiar lo que venía, los rayados o grafitis me mostraron el reflejo de todo lo que se estaba viviendo en nuestro país y el sentido de urgencia que existía, lo cual llevó a capturar todo lo que allí estaba con la misma urgencia. Aún lo sigo haciendo, ya que a diario cambian y muestran mucha creatividad, con variados estilos y representando la diversidad de necesidades/ apuros/carencias que reclaman. Si queremos construir una nueva realidad, necesariamente tiene que tener una narrativa colectiva, que nos una como comunidad o como país, y quizá aquí comienza en las paredes de nuestra ciudad y no desde los medios de comunicación, ni menos desde los políticos. Necesitamos inspirarnos para llegar a construir esta realidad más igualitaria en todos los sentidos y que, en parte, está en nuestras paredes, en nuestra propiedad pública”.
(Rouget Bugueño)